“Vos y todos los que hoy celebren su muerte estarán condenados” le dijo una gitana a Patricia Simmons luego de que matara a su marido, Áaron Simmons un hombre de de la Elite argentina de 1921. Desesperada, la religiosa señora, arrancó el corazón de su difunto esposo, creyendo que así se acabaría. Pero el corazón latirá en los odios de todos aquellos que lo preferían muerto, desenmascarando sus mentiras y sus pecados. Mientras que la pobre viuda Simmons, tendrá que ser fuerte y sobrevivir a la peor cruz de todas, su propia mente.