Todos tenemos precio. Un volumen de Cuentos para leer sin prisa y también sin pausa. Historias que ponen al descubierto cuánto pone en juego día a día cada uno de los protagonistas, sin imaginar siquiera cual situación podría llegar a presentarse. Motivo que nos involucra porque el devenir de los acontecimientos nos lleva a asociar estos hechos con aquellos que podrían llegar a ocurrirnos. 
Viviana Estela Saez explora los costados menos visibles de la realidad, repasa sus circunstancias y construye textos cargados de suspenso, extrañeza e imprevistos, llevándonos de la sorpresa a la duda o inquietud, tal es el caso de: No sabía qué le pasaba, donde nos moveremos entre distintas aguas: quizá ¿un sueño?, ¿secuestro? ¿la vida después de la muerte?, serán las opciones que nos mantendrán en vilo hasta el final. En La curva, el lector se enfrenta al segundo negado, o al eterno retorno. El cuidador del parque, lleva a un tiempo y acción que aúna el pasado y el hoy, tal vez por una deuda sin saldar. 
Todos tenemos precio, cuento que le da el nombre a este libro, de una profundidad intensa, pondrá al descubierto lo frágil que se es cuando las debilidades propias del ser llegan a ser controladas por otros. 
No faltan tampoco relatos que nos llenan de emociones profundas tales como: Solo caminamos juntas, Reunión con los muchachos, Amigo del Subte, Amor Oculto. Tampoco el toque de humor o picardía en La infanta. A los citados se agregan varios más; distintos todos y más de uno, puede mantenernos sin pestañear como el caso de: La señorita Nina, El técnico de la computadora o El amante. 
Todos tenemos precio, un sitio de lectura que nos transporta al ojo de tormenta donde el destino nos hace protagonistas y cómplice de sus jugadas. Todo un desafío…