Aprendí del Mago a aprenderme, a verme
A decirme y decir, para que la vida tenga valor.
Salir de la ceguera para ver que todo es magia
Que todo brilla y resuena conmigo
Que mi cuerpo, mi tiempo y mi existir son lo sagrado
Que el poder de todo es la mirada, lo dicho, la certeza
El Mago solo le tiene miedo al olvido
no teme olvidar, teme olvidarse.
Para vencer el olvido la urgencia del escrito.