En estos tiempos en los que la muerte es vista de lejos, donde el otro lado permanece fuera de los pensamientos del día a día, donde hablar y pensar en el fin de la vida usualmente se relaciona con la depresión o la agonía, alguien nos está observando, alguien nos está cuidando.Conocemos bien a quienes nos acompañan en nuestros primeros pasos en la vida, pero aún hay mucho por descubrir sobre quienes están incondicionalmente durante los últimos. Este libro es por ellos; por sus pensamientos y sentimientos, por sus alegrías y angustias, por sus impaciencias y su eternidad.Porque, a pesar del silencio de la muerte, tienen mucho que decir.Éstas son sus palabras.