¿Qué pasaría si en la actualidad, en medio de un país ante la crisis de valores, la pobreza, la delincuencia, la explotación a menores, el abandono y la injusticia social, aparece una persona que, con pequeñas acciones comienza a darle a los niños y adolescentes desamparados, abandonados y penados por la ley, la posibilidad de una educación, un oficio y un porvenir que los ayude a forjar su propio futuro?Esa fue la figura el Padre Joseph Rey en Francia del siglo XIX, en donde las consecuencias de una revolución, la industrialización, la pauperización, la destrucción de las familias, el éxodo rural, trajo aparejado que los niños quedaran abandonados, marginados y que comenzaran a delinquir desde muy temprana edad. Así la preocupación de este sacerdote, se convirtió en una acción creando las Colonias Agrícolas Penitenciarias. Las mismas contaban con una propuesta educativa que formaba al niño en toda su integridad.Los invito a acompañar al Padre Rey en este camino que nos muestra como una educación inclusiva puede a los jóvenes a reinsertarlos en la sociedad, por medio de la religión y el trabajo.