La autora ha recorrido, en estos cuentos, un camino de exploración en la vida de sus personajes. Indudablemente no deja de ser un retrato de su entorno y de sí misma.Busca sondear en la mente de los individuos pero sobre todo en los sentimientos, y se evidencia en casi todos, un sendero de reflexión de sus actitudes, deseos, logros y fracasos, y muy sutilmente una vía de crítica a sus propios errores pero también uno de perdón.En estos cuentos necesariamente la vida se impone y por eso mismo su mensaje se trata de que siempre se puede. ¿Qué pudieron hacer estos personajes de carne y hueso? Pudieron hacer todo lo que una persona puede hacer con su vida pero en un encuentro no casual con el dolor, la alegría, el compromiso, el deber, el placer y el amor, descubren que pueden un poco más, aunque en el trajín de la búsqueda no se dan cuenta que han sabido salir airosos en esa búsqueda de la verdad de su propia existencia.