Qué atrevimiento hacer este parangón, pero el filósofo, corpóreo como todos y con su ignorante sabiduría cuestiona al Universo, generando caminos de pensamientos. Yo, desde mi ignorancia más llana y a partir de mi diagnóstico,  me pregunté de todo; menos ¿por qué a mí? Desde ese instante, sólo quise saber de qué se trataba el cáncer, sin tanto detalle médico, y después ¿por qué vino a instalarse justo en mi mama derecha? Pensé: ¿castigo, misión, prueba, señal? Muy complicado para dilucidar, pero algo se podrá hacer, seguramente. Se transformó en una experiencia única e intransferible, que llamo una suerte de “mi metamorfosis holística” (palabras cool si las hay), donde mi salud física psíquica y espiritual, mutaron para dar con mi nueva versión de salud diferente. Cómo llegué, qué logré y cómo sigo, es lo que vuelco en este libro de la manera más genuina, simple y respetuosa. Yo, agradecida por tanto, ojalá te sirva de algo tan poco.Toda la luz, esperanza y fuerza en cualquier trance de la enfermedad que te encuentres, te lo deseo con toda mi humanidad y comprensión.