Es instante propicio para sentir el Mar, su profundidad y su ondulante marea, visiones que nos traen el fragor de mitológicas luchas e inolvidables batallas, síntesis de su bravura que armoniza con esta humanidad que acomete desafíos en sus aguas, asi también es tiempo de festejar las sensaciones que derivan de su quietud y serenidad inmarcesible en el terciopelo de sus aguas.Al Mar debemos respeto y cuidado, es el constante elemento que equilibra nuestra vida, tiene el rostro curtido de un marinero antiguo que sabe capear el temporal a la vez que posee un alma sabia y eterna en cuyas orillas edificamos sueños.Aqui estamos en Memorias del Mar lanzando nuestras redes hiladas con letras en este libro que reja influencias marinas impresas en la cultura, en los pueblos, en las raices ancestrales que nos identifican como un crisol de juglares frente a su inmensidad sin fronteras.Como Directora de este espacio cultural en la web aguardo que Memorias del Mar promueva una mirada de unidad, esperanza y paz, anhelos siempre presentes en la Literatura Hispanoamericana de este tiempo.