Las llamadas “Artes Marciales” no son deportes de combate, ni tampoco una mera forma de defensa personal frente a una eventual agresión física.El autor defiende con énfasis la idea de que su práctica es ante todo constitutiva de una forma de vida, en la medida que se sea capaz de comprender sus principios y aplicarlos a todos los ámbitos en los que una persona se desarrolle.Este libro tiene por finalidad exponer brevemente aquellos principios esenciales, de manera tal que movilicen al alumno de cualquier arte marcial reflexiones que puedan servirle para dar otra dimensión a su entrenamiento, pero que también puedan ser de utilidad para aquel que, sin practicar ninguna disciplina marcial, pueda encontrar en su filosofía premisas básicas que contribuyan a su crecimiento personal