“Cuando los mayores hablan, los niños callan”, reza un viejo dogma familiar; aunque solo sea para que los adultos conversen tranquilos.Sin embargo, Cuando los árboles hablan, guardar silencio y saber escuchar reviste una importancia vital, pues consigue marcar la diferencia entre llevar una vida conformista o vivir con verdadero significado.Cada uno de nosotros es un reflejo fiel de esta obra de arte natural, el árbol. Nace, crece, florece y da frutos, transitando las diferentes estaciones y sorteando dificultades en el transcurso. Por ende, una observación detallada y una escucha atenta pueden brindarnos claves precisas para dar respuestas a estas preguntas:¿Vivo con verdadero entusiasmo mi vida? ¿Conozco realmente cuál es mi fuego interior? ¿Resulta mi vida como la imaginé? ¿Es posible alcanzar el disfrute de la vida y ser feliz en el proceso?El personaje principal de este relato logró responder un sí rotundo a cada pregunta, pero solo después de haber buscado las respuestas en el lugar correcto. ¿Sabes tú cuál es?¡Toma acción hoy y encuentra en esta lectura los nutrientes necesarios para la superación personal!