Si hay un valor cristiano distintivo éste es el del amor “ágape”, el amor que viene de Dios y que involucra, no sólo sentimientos y emociones, sino también inteligencia y fuerza de voluntad. Es esta la clase de amor que debemos tener los cristianos tanto por Dios, como por nuestros prójimos, sobre todo si los mismos son hermanos en la fe. Ahora bien, pocos textos bíblicos muestran las distintas áreas que incluye el “amor ágape” tan clara y profundamente como Primera de Juan. Por eso, el autor ha considerado que Una iglesia amorosa –exégesis sobre esta epístola, realizada con base en el análisis semántico y sus aportes, ubicados en el contexto de ciencias del lenguaje contemporáneas– puede constituir una contribución para que las iglesias cristianas podamos vivir más intensamente el amor ágape tanto hacia adentro como hacia afuera, en una sociedad como la del siglo XXI. Sociedad que oscila entre diversos modos de un amor superficial y egocéntrico y un odio caracterizado por una violencia en constante aumento. La obra consta de cuatro capítulos: dos introductorios y dos dedicados a la exégesis del texto mencionado.