El autor ha dicho que cuando se han cumplido muchos años es posible –como al escalar muy alto– que pueda sentirse cansancio, pero el horizonte se hace más amplio divisándose las cosas del pasado e intuyendo lo que vendrá.
Y Sir Francis Bacon manifestó en una ocasión: Vieja es buena leña para arder, vino viejo para paladear, viejos amigos en los que podernos confiar y viejos escritores para ser leídos con placer.
Cuando, dentro de muy poco, termine de ser editado este libro, quien lo escribió estará muy próximo a cumplir noventa y dos años, y en este libro nos cuenta algunas cosas que, estamos seguros, interesarán tanto como a nosotros nos han interesado.
Por ello aconsejamos su lectura.