Publiqué mi primer trabajo literario siendo un adolescente de 17 años.
Dejé de escribir por casi 40, hasta volver a pensar que la manera escrita era la mejor para expresar mis sentimientos. Entonces lancé mi segundo ejemplar.
Ahora, pasados 10 años, luego de haber transcripto cada momento, cada vivencia y muchas emociones de este tiempo, vuelvo a editar un libro. Esperando que no sea el definitivo.
El título “El último de los enamorados” me identifica. En una época en que la pasión, el amor y los recuerdos nos llegan a través de pantallas, elijo transmitirlos con palabras.
Hoy tengo 65 años y soy el niño que fui, el adulto que formó una familia y el hombre que siempre apostó a la vida.
Aún recuerdo como hace 50 años atrás, rescato historias de ese pasado y me someto al amor por la mujer que me enamoró.
Por eso lo escribo.
El amor, esa extraña conjunción que parece dormida y que ante el más minimo roce se despierta y no se vuelve a dormir.
En este, hay mucho de ese amor. Textos que escribí como testimonios y otros que plasmé como cuentos cortos.
Como dije en el libro anterior: “El amor siempre en primera persona”.
Poesías de amor.
Ensayos que describen la vida desde el amor.
Cuentos cortos que la vida me regaló y que son recordados con inmenso amor.