La intención de este libro es precisamente entender y potenciar a las personas con discapacidad a partir de sus capacidades, de lo que sí pueden hacer y lograr, permitiendo de esta manera desarrollar al máximo las potencialidades que cada uno posee.
El paradigma de la discapacidad fue cambiando con el transcurso del tiempo tanto en lo deportivo como en lo educativo. Desde lo deportivo, a partir de los Juegos Paralímpicos de Beijing 2008, llamados “Los juegos de la no discriminación”, hubo un crecimiento sustancial desde el rendimiento, la tecnología, el impacto social y se comenzó a ver al atleta con discapacidad como los deportistas que realmente son.
Desde lo educativo, se habló primero del niño con discapacidad en la escuela especial, del estudiante integrado y hoy hablamos de proyectos inclusivos. Desde la perspectiva de la discapacidad, nos encaminamos desde hace muchos años hacia un horizonte en el que podamos dar respuestas a las diversas necesidades de todos y cada uno de nuestros estudiantes, sin estigmas, ni etiquetamientos. Tanto es así que la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad ha propuesto el actual modelo inclusivo como parte de un proceso para democratizar la educación.
Cuando hablamos de inclusión nos referimos a que los estudiantes de cualquier comunidad compartan experiencias desde sus singularidades y sus diferencias, sin ningún prejuicio respecto de sus condiciones, sus culturas o las situaciones en las que están inmersos.
Todos son niños, adolescentes y jóvenes, aprendiendo con otros.