La vida en el campo tiene un ritmo diferente al de la ciudad, las noticias sobre la pandemia impactan de una manera hasta jocosa en un grupo de “gauchos” que reunidos frente a un fogón van dando cuenta de sus encuentros con otros “espantos”.
Es un espacio donde la realidad pierde sus límites y la fantasía irrumpe con la bravura de estos personajes exaltados y caricaturescos.
También otras historias aparecen completando una mirada sobre esa vida rural que es la esencia de nuestro patrimonio cultural, el sacrificio del hombre de campo se despliega con tintes a veces dolorosos y otros divertidos como un laberinto donde se extravían las circunstancias de una vida no siempre tan apacible.