Solo un punto negro, cuentos de Enrique Petracchi que nos muestran cuánto ocurre y cómo en la intemperie. Esa zona ignorada o apenas asimilada como existente.
Un lugar fascinante donde aguardan momentos curiosos e insólitos que revelan lo imprevisible que puede resultar todo, aún lo más simple.
Indicios, señales, fragmentos que asoman y arman el rompecabezas del destino al que luego fusionan en aquello que se vive, existe, aguarda, languidece, goza, etc.
Bolsillos, Medias de toalla, Solo un punto negro, Verdades a medias, Cuando el ciego se queda sordo, La laguna, Nos falta uno, Intento de suicidio culposo.
Son algunos de los cuentos que nos llevarán a ser parte de ellos, por la simple razón de esas cuestiones diferentes, que no lo son tanto y nos enfrentan con nuestra tan temida y amada interioridad y sus circunstancias.
Compañías ausentes, soledades cómplices, y más…que Enrique Petracchi desnuda con aguda intensidad desvistiendo situaciones que suspenden, llenan de interrogantes y dejan sin aliento impulsando a la lectura sin pausa.