¿Qué pasaría si el tiempo no existiera? ¿Si lo único que tuviéramos fuera un presente eterno, sin pasado ni futuro? ¿Tenemos algo más que un presente perpetuo, en realidad?
Sobre estas preguntas nos invitan a reflexionar los Relatos sin tiempo reunidos en este libro, relatos en los que los personajes viajan por universos familiares que pueden comenzar en un viejo patio repleto de árboles frutales para extenderse en las hipérbolas alabeadas del espacio infinito.
Si el tiempo es apenas una ilusión y el espacio se repliega y se multiplica en una sucesión de universos, los niños y niñas que hemos sido, los jóvenes y las ancianas y ancianos que seremos existen simultáneamente junto con las personas, perros o paisajes que nos han acompañado en otros tiempos, pero que nos esperan a la vuelta de la página. 
Las imágenes que el autor recrea, tan cálidas como poéticas, nos reciben con la simpleza de una charla entre personas queridas, en la que se ponen en juego lo cotidiano pero también las preguntas más profundas sobre nuestra propia existencia. 

Florencia Rumi