La considerable extensión territorial y la desigualdad de desarrollo de sus diversas regiones hacen de Argentina un país de significativos contrastes, en el que las tribus indígenas, distantes de la civilización son contemporáneas de grandes ciudades.La autora, basada en trabajos de campo, llevados a cabo en Brasil, solicitados por la UNESCO, a mediados del siglo XX, pudo establecer que en todos los relictos sobre los cuales se obtuvo información, los mismos pusieron de manifiesto que no fueron asimilados a la sociedad nacional como parte indiscernible de ella.Para alcanzar sus conclusiones, la autora efectuó primero un análisis descriptivo de los distintos pueblos indígenas que ocuparon el territorio y que aún hoy algunos de ellos prevalecen; no sólo bastó ello, sino que estimó necesario tratar el significado de la integración que alcanzaron los grupos indígenas en el país, es decir, dilucidar algo respecto a la integración etnológica de lo sucedido con el aborigen.