¿Usas al dinero, o el dinero te usa?¿Perdiste la inteligencia porque el dinero te maneja?¿El dinero te controla, te presiona, hasta hacerte pagar por tu muerte?¿El dinero compra tu sexo, tu libertad y tus deseos?¿Tu patria se hunde arrastrada por los cínicos, que aman el dinero sucio?¿Te mienten con el bullicio de infinitas palabras huecas, y con las muertas banderas, que aislaron y desolaron tierras sufrientes?¿Quieren con dinero sucio cargarte de odio y enfrentarte a tus hermanos o a otras naciones?Hay una urgente decisión a tomar: dominar al dinero. Palabras impetuosas, incisivas y valientes, profundamente reflexivas y conscientes. Tal es la ráfaga de ásperas verdades que a modo de ¨denuncia¨ y de señal de alerta Lucrecia Miranda Almagro alega en su libro. Para dar precisión a sus ideas, no duda en recurrir, casi en igual medida, tanto a la prosa como a la poesía. Datos, hechos y nombres los que expresa con una, mientras que con la otra äliviana la vista y el alma del lector, confiesa, pero sin reducir su nivel de dureza. Su amigo Bioy le decía por eso: ¨…pueden ustedes los poetas escribir sobre la muerte, sin haber pasado por ella¨. Pero pese a todo este crudo panorama que así plantea, ella expresa con franqueza que ¨vivir¨ ¨es su mayor proyecto¨. Lucrecia Miranda Almagro, al ingresar a la Universidad de Ciencias Políticas y Diplomacia, se incorporó a la Embajada de Mujeres de América, que reunía a lo más granado de las artes, las humanidades, las letras y la ciencia, donde tuvo la oportunidad de escuchar y dialogar con escritores como Borges y Adolfo Bioy Casares. Ha escrito numerosos artículos en diarios y revistas, entre sus publicaciones se destaca Poemas, Decires y Pensamientos Publicables. Y en este momento ya cuenta con las primeras letras de su próximo libro. Periodista Mariana Barry, Revista buen ayre. En el DINERO NO MANDA, la señora Lucrecia Miranda Almagro clama por la valorización de vocaciones artísticas y el talento que vaya más allá de lo que la plata daría por ella. Señala que hasta en la televisión el dinero parece condicionar lo que se ve, reemplazando la cultura por ratings y cuasi pornografía. En el Infierno de la DIVINA COMEDIA, la pena para los indiferentes es correr, azuzados por abejas que amenazan con picarlos. No es el caso, por cierto de Almagro. En la sección del libro denominada ¨Mis cavilaciones¨, además de exponer lo que está sintetizado arriba, la autora apunta a ilustrar estos temores en tres poesías. En ¨Seres color sepia¨ se llama la atención al hecho de que uno debe tener identidad bien definida para poder hacer frente a cualquier batalla, en este caso, en contra del dinero. Este poema brillante nos lleva a recordar el cajón de las fotos de la abuela, donde hay muchos seres desconocidos. Que no pase lo mismo con nosotros… La autora, basándose en la parábola de los talentos, desarrolla un cuento en el que juega con las acepciones de talento. Cada vez se le da más lugar al talento como moneda y menos al talento como inteligencia. La solución sería la educación que forme a los jóvenes como ciudadanos. Termina con un propuesta original ¨Una chifladura¨, jugando con el diccionario de antónimos y sinónimos, intento cortazariano de una mulier ludens. Almagro ha plasmado un profundo estudio sobre el uso y el desuso del dinero. Nos aclara a dónde, cuándo y cómo se coloca ese dinero. Hace una encendida, pero ordenada protesta con respecto a la plata. No intenta herir a nadie, sino hacer reflexionar sobre temas que damos por hecho. Nos cuenta las paradojas de la sociedad tecnológica y, mientras tanto, nos pide que no dejemos que el poder mal usado nos incite a perder valores. María Valeria Conesa, Prof. de Letras¨ Diario ¨La Nueva Provincia¨. Entrevista radial: en Radio Rivadavia, con el Periodista TOMÁS DEL DUCA, del sábado 29 de agosto de 2009. La escritora y artísta plástica, quién editó el libro El Dinero No Manda, Editorial Dunken, dijo: que con el dinero el hombre no sólo quiere mandar, sino aprovecha para esclavizar y usarlo mal. EL dinero no manda, es que se usa de una manera que no corresponde; el dinero debe servir al hombre. La escritora expresó: ¨sólo hay una forma de dominar al dinero y ella es DANDO EDUCACIÓN. …He leído sus reflexiones y al fin, una vez más, he llegado a la conclusión de cuánto bien se puede hacer, ya sea a nosotros como a los demás, con una publicación iluminada por sólidos principios. Monseñor Adriano Bernardini, Nuncio Apostólico …El libro me parece muy logrado. Ud sabe hablar en su lenguaje al hombre de nuestro tiempo, pero incitándolo a mirar hacia lo alto, no enfrascándose en la inmanencia. Espero que sus lectores sean numerosos para que el bien se haga lo más difusivo posible. P. Alfredo Sáenz