¿Se puede ser partícipe de una historia sin haber estado presente? ¿Es posible pensar y sentir lo mismo que el protagonista sin siquiera haberlo conocido? 
Santiago Farfallini (o “Farfita”, como me gusta decirle) es el encargado de llevarnos a ese lugar que parece imposible en cada uno de los relatos de esta serie. Con lujo de detalles y sin caer en el aburrimiento de estos, nos veremos inmersos en distintas historias que tienen un único punto en común. Bueno, más que punto, una esfera. 
Todos aquellos que tuvimos la suerte de disfrutar el fútbol en carne propia (no como hinchas, sino como jugadores) sabemos perfectamente que más allá de lo que se ve a simple vista en cualquier picadito, hay muchísimo trasfondo que sólo conocen los protagonistas. 
Una amistad de años no necesita un “¡Cambiala toda!” para saber dónde encontrarse. Un “amistoso”, con miles de historias que enlazan a los participantes, puede terminar con más roces e intensidad que la final de cualquier campeonato profesional.
Esa magia única e inexplicable -hasta ahora- en palabras que tiene el amateurismo futbolero en nuestro país, se encuentra maravillosamente expresada en cada párrafo de estos relatos. Emocionantes, divertidos, refrescantes y, sobre todo, tangibles. Es inevitable encariñarse con cada uno de los personajes y sentirnos ahí mismo, al lado de ellos, o en la tribuna alentando. Esperando que nuestros corazones aguanten un ratito más, sólo para poder seguir disfrutando.

Mariano Ariel Sosa 
(Marianito)