Lope Felix de Vega Carpio, por la extensión de su obra, ha sido uno de los más prolíferos poetas de su tiempo. Bromeando, hemos insinuado que Vives Heredia se ha contagiado de él, pues da la impresión que está jugando una carrera con sus lectores, escribe más rápido que éstos pueden leer. La copiosa variedad de sus temas, es también sorprendente.
El carácter humorístico que es propio de su personalidad lo ha llevado a burlarse de esta circunstancia, y cuando los amigos le comparan con el poeta madrileño del sXVII, se sonríe diciendo que Lope ha sido sin duda el Félix de los ingenios, pero que él sólo ha podido llegar a ser como el Gato Félix nacido en el cine mudo, y, como él nonagenario.
Sin embargo, este no es un libro jocoso. Es la continuación de Los Poemas Dedicados, publicados por esta editorial DUNKEN en Noviembre 2017, pero la velocidad productiva a que hemos hecho referencia impone este segundo tomo.
La mayor parte de las composiciones son sonetos rimados, y en la última parte el escritor vuelve a ofrecernos el Haiku de origen japonés, y una milonga dedicada al tango.
Esta editorial se complace en recomendar su lectura, que no sólo brinda placer estético sino conceptos que invitan a meditar.
Los Editores.