La importancia de un hombre se debe a su personalidad, a sus ideas, a su trayectoria, a sus obras.
Jean Pierre Sitiú describe con su clásico idioma coloquial el paso de Joop entre los argentinos pues consideró que era un ser de valía no valorado.
Su historia no merecía el olvido.
Este libro rescata la trayectoria de un hombre que, como otros tantos, descendió de un barco un día, se adaptó como nadie, armó una familia y contribuyó de manera anónima a la construcción de obras básicas fundamentales para el desarrollo de una Argentina que había que desarrollar.