En las letras armoniosas de Ronny Levy Benlabrat hallaremos sentimientos de amor y entrega plenos, un corazón que entre lo humano y lo divino da su caudaloso torrente de inspiración para envolver en un vasto piélago ?oral la piel y el alma de Eva, mujer terrena y celestial, que se presenta en las más diversas formas, poderosa o esclava, mecida entre el Amor y el desamor de todos los siglos sobre la lujuriosa entraña de la Tierra, luciendo su estandarte, siempre Mujer.En esa Eva mitológica, divina, poeta, labriega, se encienden sobre su faz los soles de su poesía germinativa en secuencias de metáforas encantadas, que parecen suceder a las loas del Cantar de los Cantares.Queda aguardar que en cada lectura se pueda aquilatar la riqueza interior y sensibilidad del autor y su profunda convicción de amor por la Mujer Universal para retornarla a fuerza de sinceros versos, a los Caminos al Paraíso.