Bendita Tierra evoca recuerdos, emociones y sentimientos que se conjugan en espacios recorridos, en olores conocidos, en sonidos, en encuentros que dejan rastros desde los cuales investigar el alma humana, sus matices, sus silencios, sus soledades e incomprensiones.Bendita Tierra refleja en sus poesías los interrogantes y desafíos que encuentra la autora en la cotidianeidad. Busca desentrañar la telaraña de la existencia humana, mientras urde con palabras y colores la trama de su propia vida, en una búsqueda permanente de sentido existencial, valorando las huellas y cicatrices que quedaron plasmados en su alma.La tierra es el centro desde el cual parte este recorrido, la que nos contiene, la que nos abriga, “la tierra, de frutos y de sales, de aves, flores y manjares, esta bendita tierra, en la que poder amar.”