Bahía BlancaMail:bernardo194880@yahoo.com.arPágina web:www.lapizarra.costabravaA la pizarra la “mamé” de muy pequeño, por más de sesenta años.En el tiempo en que iba a la escuela, la pizarra de piedra era muy normal. Sería por economía, practicidad o las dos cosas, pero aquellas pizarras de piedra laja negra, con el marquito de madera, estaban en la maletita de los que podíamos ir a estudiar. ¡Ah! me olvidaba del pizarrín con que escribíamos. Era como un lápiz de piedra, del mismo material que la pizarra.Quizás estos recuerdos tan puros hayan sido los que me empujaron en la actualidad, a colocar en mi lugar de trabajo una pizarra donde todas las mañanas escribo algo positivo, a veces un poco duro o autocrítico, pero el fin siempre es la búsqueda del conocimiento, la armonía y el amor.