Desde la calma apacible de un atardecer en el campo, hasta la turbulencia de un terremoto sacudiendo la tierra, la naturaleza se expresa poéticamente. La vida misma es poesía. Todo cabe en la copa que sabe saborear quien se acerca con un corazón sensible y abierto, como digo en un poema: -Ha nacido el poema del vientre de la Vida. Y quienes lo leen asisten a la fiesta. No importa si hay tristeza. Siempre un poema cimbronea el alma que sensible lo recibe. Y paladea-. La poesía es disfrutable, en tanto expresa con palabras ajenas, lo que otro quiere decir. Escribo como respiro. La poesía, es en mí, un Sentir.