PANEL DE AUTOR - Ingrese desde su libro en la Librería Online
Logo Dunken Stand en la Feria del Libro
Siempre al servicio del autor
Buscador Publicar mi libro
Siete historias de docentes bonaerenses
Conde Rafael Ricardo
ISBN: 978-9878502083
EDITORIAL DUNKEN
COLOFÓN: 2019-08-07
104 páginas
Relatos


$4000
u$s40.00
Sinopsis

En estas siete historias el lector quizás conozca el ambiente y las condiciones en que los docentes del Conurbano bonaerense desarrollan su oficio. El primero que leyó estos textos, dijo: “Decime que nada de esto es verdad”. Bueno, lo cierto es que esto que usted está leyendo es ficción. Pero la materia de la fábula es la verosimilitud. Para eso el relator tiene que haber vivido algunas cosas para contarlas asemejándolas a la realidad. 
En nuestro país se venera a los llamados docentes rurales. Hay historias y documentales que muestran al sacrificado docente del campo y de las sierras. Las entrevistas que constituyen la materia de estos relatos se iniciaron con el motivo de homenajear a ese otro colectivo docente, el del conurbano bonaerense. Esos que pagan de su bolsillo las magras fotocopias con las que nuestros niños y niñas aprenderán a leer; nuestros muchachos y muchachas a filosofar y todos a querer una Patria que parece lejana entre el barro y el frío y el hambre y el olvido. Esos y esas docentes que ven por la ventanilla del tren o del colectivo las inservibles casillas de cartón y de chapa acribillada de agujeros oxidados, el paisaje suburbano de donde saldrán a la misma hora sus alumnos para ir a la misma escuela miserable. Única institución que los reconoce como ciudadanos y les defiende sus derechos inalienables. Esos maestros y maestras, profesores y profesoras que muchas veces son la única versión concreta del Hombre que imaginaron San Martín, Belgrano, Moreno, Rosario Vera Peñaloza, Susana Pertierra, Chacho Arancibia, Carlos Fuentealba, al conjeturar la Patria. ¿Quién recordará algún día a esos y a esas docentes? Cuando pasen los tiempos de los genocidas que reparten hambre y fugan dólares mientras prometen que después del sacrificio vendrán los buenos tiempos que no llegan nunca, yo espero que esos docentes que me enseñaron una forma de la vida, un motivo para vivir y luchar, sean recordados. Cuando nos desembaracemos de las más arraigadas taras que nos hacen repetir el pasado; cuando ningún imperio se atreva a robarnos el futuro, será porque el colectivo docente contribuyó a la creación de ese lugar común, soñado, añorado, amado: La Patria.





COMENTARIOS SOBRE EL TÍTULO (por favor, no realizar consultas por este medio)